viernes, 28 de septiembre de 2007

Florida 1995



En un viaje por Florida (USA) tuve la oportunidad de visitar las instalaciones de la NASA en Cabo Kennedy.
Lo que en principio parecía ser un viaje interesante desde el punto de vista curiosidad científica y tecnológica, resultó ser un fiasco en todos los sentidos.
La visita comenzó, previo pago, en un autobús, estilo escuela americana, típicamente utilizados en todas las instalaciones militares del ejército americano.

Con explicaciones de los diferentes sitios que se visitaban, eso sí, sólo en inglés, ¡faltaría más!, el chofer, con un perfecto perfil de ex-militar, pasota de todo y de todos, intercalaba chistes malísimos de aquellos que suelen contar en las series americanas y que les obliga a incluir las risas enlatadas porque, si no, todo el mundo quedaría dormido.

Así pasamos por las torres de lanzamiento de los transbordadores espaciales, pero sólo vimos el edificio por fuera, ¡vaya! nada.

Pasamos por el centro de control que se utilizó durante la llegada del primer hombre a la luna en 1969. ¡Qué decepción! La tecnología era tan anticuada que parecía imposible que hubiesen llegado a algún sitio. Además justo al lado del centro de control había una representación del módulo lunar en un escenario que podía perfectamente ser territorio lunar. En ese momento el "fantasma", ampliamente difundido durante los años setenta, de que todo había sido una farsa, se me pasó por la cabeza. ¿Sería verdad que no habían salido de aquel estudio de televisión para llegar a la luna?.

Nos hicimos la foto "souvenir" con el astronauta "Disney style" que quedaría para la posteridad. Seguramente aquel astronauta tan terreno hablaría perfectamente español y nunca habría montado ni en avión, ¿Sería uno de los múltiples mexicanos clandestinos?.

Visitamos una pequeñísima exposición de los diferentes tipos de cohetes utilizados para la aventura espacial. Realmente decepcionante.
Se pueden imaginar al cohete "Apolo" como una sucesión de depósitos esféricos de combustible enlazados unos con otros y todo eso recubierto por una estructura cilíndrica que representaba el cohete.
Trato de imaginar lo osados que fueron aquellos pioneros y el miedo que debían de llevar a la luna con semejante "cobete" en el culo. ¡Chapeau!.
Además, en aquel viaje, parece ser, que hasta los conmutadores eléctricos del módulo lunar fallaron al despegar de la luna para volver y tuvieron que utilizar un bolígrafo metálico para hacer el cortocircuito correspondiente.
Puede ser que esto último no sea cierto y sólo se trate de una estrategia de marketing para un bolígrafo en el que, solo en su desarrollo, habían invertido una fortuna. Es cierto que escribía en cualquier posición,vertical, horizontal, se podía escribir bajo el agua, sobre un medio graso…¡vaya, una maravilla!, (debo confesar que tengo una reproducción de ésta maravilla y funciona perfectamente).
Cuando ahora acusan a alguno de los astronautas que salen en el transbordador espacial de agarrarse una buena "melopea" antes de salir, no me extraña en absoluto.
El ser humano, como cualquier animal, tiene miedo ante ciertas situaciones, pero, si además se conoce perfectamente el funcionamiento del ingenio donde deben sentarse "tranquilamente" y ¡que sea lo que Dios quiera! no me extraña que se echen una copita para olvidar antes de salir.

Por lo que pude ver en un programa de televisión sobre astronáutica rusa, el "cementerio" de cohetes espaciales ruso era aún peor, aquello se parecía mas a un cementerio de locomotoras de vapor que a cualquier cosa que tuviera referencia a la supuesta alta tecnología empleada en éste tipo de aventuras.

Los europeos no nos quedamos atrás y sino ahí tienen el lanzamiento del primer Ariane 5 (4 de Junio de 1996) donde en plan casero los informáticos intentaron adaptar el software que habían empleado con excelentes resultados en el cohete Ariane 4. Como fin de fiesta de esta "chapucilla" el cohete perdió el control en el despegue y ha pasado a la posteridad como los fuegos artificiales mas caros de la historia espacial. (Hay que excluir los múltiples fallos, incluso tripulados, de la carrera espacial Norteamericana, - Of course!!.

-No seas tan negativo……bueno, debo confesar que al menos la película que nos ofrecieron en la visita, en pantalla supergigante, sobre la carrera espacial, fue una maravilla. El conseguir una copia, que por supuesto estaba a la venta, requería ciertos conocimientos de sistemas de grabación sobre cinta magnética - ¿ VHS, NTSC, 2000 ?.

Al final de la proyección un pequeño percance con una Sra. Norteamericana:

Cuando salíamos de la sala de cine Patt exclamó:

¡Cuando veo éstas cosas me siento orgullosa de ser Americana!

Mi ego maltratado por haber pagado por ver ese desastroso recorrido por las supuestas instalaciones de la NASA, me hizo responderle que también habían tenido una segunda guerra mundial donde hicieron la vista gorda a los campos de concentración nazis, una guerra de Corea, otra de Vietnam que perdieron y que continuaban a meterse donde no les llamaban continuamente.

Fui GROSERO y muy BURRO al responder de esa manera, ¡lo siento Patt!. Perdóname donde estés.

El colmo de los colmos fue el paso -obligado- para poder salir de aquel recinto, por un supermercado exprexamente acondicionado para que los turistas se dejen los dólares "por narices".
Medallas conmemorativas de las hazañas espaciales, figuras Disney vestidas de astronautas, corbatas, alfileres de corbatas, vasos, tazas, lapiceros, bolígrafos, pisapapeles…y un largo etc de inutilidades que después no sabes donde meter y que además puedes encontrar en cualquier estamento americano que se precie. (Lo mismo encontré en la estatua de la Libertad, Disney Florida, Disney París, Museo de Ciencias Naturales de NY….no sigo por no aburrirles).

¿Saben cual es el mejor sistema de protección contra la incursión de espías por tierra en el centro espacial de Cabo Kennedy?
Simplemente en las marismas que les rodean han dejado crecer una gran colonia de caimanes que de vez en cuando se atraviesan en la carretera y a los que, según las indicaciones de las señales de tráfico, no hay que molestar sobre todo por la noche - al que salga del coche…¡se lo zampan!.

La vuelta a la civilización se produjo desde el aeropuerto de Sarasota Bradenton hasta Miami y lo cierto es que a pesar de que el recorrido era corto lo hicimos en un pequeño avión bimotor a hélice que no tenia muy buena pinta lo que se confirmó al aterrizar. El piloto agradeció al pasaje el haberle acompañado en aquella "aventura" e hizo bajar a todos los Santos del cielo para agradecer el haber llegado correctamente, o era muy religioso o le pasaba igual que a los astronautas, tenia mucho miedo.

Es célebre entre los pilotos el dicho:

Si ves a alguien, en la cabina de pasajeros, rezando el rosario, ese es un piloto.

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